La Convocatoria Ambiental de General Belgrano presentó el primer informe de impacto ambiental del distrito, en donde se recabaron muestras de suelo y agua que arrojaron la presencia de diferentes agroquímicos.
El día viernes, la Convocatoria Ambiental de General Belgrano dio a conocer el primer informe de impacto ambiental del distrito, en el cual se recabaron muestras de suelo y agua que arrojaron la presencia de diferentes agroquímicos, tanto pesticidas como herbicidas, que atentan contra la salud de la comuna.
En un trabajo coordinado desde hace un año, desde la Convocatoria se realizó un muestreo general en distintos puntos del partido, en coordinación con el INTA de Balcarce, y con certificación de una escribana pública, para demostrar ” procesos de movilización de plaguicidas en el ambiente por fuera de los sitios de aplicación”.
“Desde la Convocatoria venimos peleando por el tema de las distancias y la reglamentación de las multas, que pueda entrar en funcionamiento, porque actualmente hay una ordenanza aprobada pero que todavía no se encuentra en vigencia” sostuvo Maximiliano Fourcade, integrante de la Convocatoria.
Y agregó: “El Municipio siempre nos vio como un grupo de gente que les quiere complicar la vida, cuando nosotros siempre hemos sido lo más abierto posible. Nunca han querido colaborar con nosotros, ni se han abierto a poder armar cosas en conjunto. Muy pocas veces nos han dado un espacio, muchas veces porque se han visto obligados”.
Justamente desde la Organización plantearon, en primera medida, articular con la gestión de Osvaldo Mario Dinápoli para la realización del estudio, que pueda servir como un diagnóstico de la situación actual para atender problemáticas relacionas con la salud pública. “La carta que les enviamos nunca fue respondida. En base a eso comenzamos analizar las formas que podíamos tener de juntar fondos para llevar a cabo el estudio”, comentó Fourcade.
De esta manera los vecinos y vecinas de General Belgrano se organizaron a través de rifas, colectas, y el aporte de una organización de Alemania que les permitió llegar a solventar los 120 mil pesos que costó la realización del estudio.
Los agroquímicos detectados afectan a la salud
A lo largo de un año, la comunidad organizada en la Convocatoria Ambiental, se dedicó a recabar la toma de 13 muestras de diferentes matrices ambientales (agua superficial, agua subterránea, suelo, sedimento y aire), las cuales fueron extraídas de sitios que no tienen relación alguna con la producción agropecuaria de la zona, destacando lugares como jardines de infantes, plazas públicas, balnearios públicos y escuelas.
Los resultados fueron determinantes: En los muestreos se detectaron una variedad de 34 moléculas de plaguicidas en el total, en el cual 31 moléculas estuvieron presentes en muestras de agua, 12 en muestras de suelo/sedimento, y 6 en muestras de material vegetal.
“Las muestras de agua representan la matriz ambiental en la que se detectó una mayor variedad de las moléculas de plaguicidas. La mayor parte de las moléculas detectadas corresponden a herbicidas, siguiendo en menor medida insecticidas y fungicidas”, indica el informe difundido por la Convocatoria Ambiental de General Belgrano.
En ese sentido, los agroquímicos que se detectaron en mayor medida, fueron el glifosato y su principal producto de degradación, el metabolito AMPA, aunque también se registró la presencia de Atrazina (69%) (agua y suelo/sedimento), Epoxiconazol (54%) (agua, suelo/sedimento y aire), Glifosato (54%) (agua, suelo/sedimento y aire), AMPA (54%) (agua, suelo/sedimento y aire) y Pirimicab (54%) (agua y suelo/sedimento), Atz-OH (46%) (agua y suelo/sedimento), y Acetoclor (46%) (agua y suelo/sedimento).
Estos químicos al exponerse al contacto o relación con el ser humano pueden ser causantes de graves daños en el sistema nervioso, por lo que se anunció con gravedad la presencia de estos elementos en lugares que son de uso común para toda la comunidad de General Belgrano.
Una realidad que afecta a toda la Provincia
Desde la Convocatoria aclararon que “los límites de exposición representan cantidades debajo de las cuales es posible estar expuestos a determinada sustancia sin sufrir efectos adversos”, sin embargo advirtieron que existen “inconvenientes con los límites críticos de exposición”.
“No existen límites definidos para evitar la exposición y toxicidad crónica a largo plazo, es decir la que produce enfermedades que se desarrollan con el tiempo luego de que el organismo fue expuesto una o repetidas veces al plaguicida. Numerosos plaguicidas son capaces de generar efectos nocivos a la salud a muy bajas dosis. Puede decirse que no hay dosis mínima debajo de la cual haya seguridad de no desarrollar una enfermedad cuando se está expuesto a estos agroquimicos”, indicaron en el informe.
Esta es una de las tantas realidades que están aquejando a los distritos bonaerenses de la Provincia, que luego de casi 30 años de implementación del paquete tecnológico y el corrimiento de actividades económicas primarias (principalmente el reemplazo de la ganadería por el cultivo de soja y maíz), está comenzando a presentar consecuencias para la salud de sus comunas.
Además, en conjunto con la comunidad de Baradero, General Belgrano se transformó en uno de los primeros Partidos en generar su propio estudio de impacto ambiental, una iniciativa que en todos los lugares fueron motivadas y movilizadas por la comunidad en su conjunto.